Fallece Mikel Lorente, guarda del refugio de Cap de Llauset, tras sufrir una caída en el Pico Russell Oriental
El montañero bilbaíno, de 39 años y residente en el Pirineo, se precipitó unos 300 metros mientras descendía en el Parque Natural de Posets-Maladeta.
El Accidente del Guarda de Llauset
Mikel Lorente, guarda del refugio de Cap de Llauset y experimentado montañero, ha perdido la vida tras sufrir una caída de aproximadamente 300 metros en el Pico Russell Oriental, en el Parque Natural de Posets-Maladeta. El trágico suceso ocurrió el pasado martes por la tarde, en el término municipal de Montanuy (Huesca).
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Seguridad en montaña
La alarma saltó a las 18:26 horas, cuando el montañero no regresó al refugio a la hora prevista. Sus compañeros, preocupados por su ausencia, alertaron a la Guardia Civil de Huesca, que activó de inmediato un operativo de búsqueda en el que participaron efectivos del GREIM de Benasque y la Unidad Aérea de la Guardia Civil de Huesca.
Este miércoles a las 11:30 horas, los equipos de rescate localizaron su cuerpo en una zona de terreno abrupto bajo la cumbre del Pico Russell Oriental, sin signos vitales. Su cuerpo fue evacuado en helicóptero hasta la helisuperficie de Benasque, donde los servicios funerarios lo trasladaron al Instituto de Medicina Legal de Huesca.
Un referente en el refugio más alto del Pirineo
Lorente, nacido en Bilbao, residía desde hacía años en el Pirineo aragonés, concretamente en la localidad de Senet (Lérida), muy cerca del refugio de Cap de Llauset, donde era el guarda titular desde hacía nueve años.
El refugio de Cap de Llauset, propiedad de la Federación Aragonesa de Montañismo (FAM), es el más alto del Pirineo aragonés, situado a 2.425 metros. Inaugurado en 2016, cuenta con 30 plazas y ofrece servicios esenciales como calefacción, duchas y bar, siendo un punto clave para el montañismo en la zona y la ascensión a los picos de Vallibierna y Russell, donde Lorente encontró la muerte.
Apasionado del esquí de travesía, Mikel compartía en redes sociales su día a día en el refugio, sobre todo en invierno, cuando las intensas nevadas lo mantenían aislado durante días. Uno de sus vídeos se hizo viral el pasado invierno al relatar cómo llevaba jornadas enteras sin ver a nadie debido a un fuerte temporal.
Un compromiso con la montaña y la seguridad
Además de su labor como guarda, Mikel era un montañero experimentado y comprometido con la seguridad en la montaña. En abril de 2024, protagonizó un rescate nocturno en plena ventisca, salvando la vida de dos montañeros vascos que se habían desorientado cerca del refugio. A pesar de las duras condiciones meteorológicas, salió en su búsqueda y logró llevarlos a salvo hasta el refugio, demostrando su valentía y entrega.
Segunda víctima mortal en la montaña en 2025
La trágica muerte de Mikel Lorente se suma a la del alpinista catalán Gerard Olivé, de 41 años, quien fue hallado sin vida el pasado 4 de enero en el macizo del Aneto, tras desaparecer el 31 de diciembre mientras intentaba ascender la cresta de Salenques.
Las cifras de accidentes en montaña siguen siendo preocupantes. En 2024, Aragón registró un récord histórico con más de 600 auxilios y 25 fallecidos. Ante esta realidad, el Gobierno de Aragón ha reforzado en 2025 la campaña «Montaña Segura», con el objetivo de mejorar la prevención y reducir el número de accidentes.
Un adiós a un referente del montañismo
La comunidad montañera llora la pérdida de Mikel Lorente, un guarda entregado a su labor, amante de la montaña y defensor de la seguridad en alta montaña. Su legado quedará marcado en el refugio de Cap de Llauset, donde durante casi una década recibió y asistió a cientos de montañeros.
Desde el Pirineo aragonés, su recuerdo permanecerá en cada ascensión y cada travesía, inspirando a quienes aman la montaña tanto como él.
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