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Atrochando

Dos días por Picos

marzo 25, 2020
Dos días por Picos

Dos dias por Picos de Europa

Índice

¿Que hacemos en dos días por Picos?

Las rutas, los retos y la pasión que nos mueve siempre comienzan igual: ¿Y que hacemos este finde?
Así, sin más, comenzamos a buscar algo diferente que nos haga sentir la aventura que nos llena de ilusión.

En un instante proyectamos una nueva aventura, ir a Picos de Europa por dos días, subir al funicular de Fuente De y pasar por la montaña dos días de los que quedan metidos para siempre en la mente y en el corazón.

Dos días por Picos
La ruta

Decididos y a por ello:

La idea inicia era trasladarnos hasta Fuente De y desde allí tomar el teleférico, para hacer cumbre en el Pico Tesorero, esto fue variando hasta llegar a la conclusión de que podíamos pasar noche alli arriba, bien vivaqueando o en el Cabaña Verónica, pero todo fue evolucionando, como de costumbre.

Salimos en las furgos camino de Cantabria, y llegamos hasta Potes, donde la tarde noche del viernes hicimos visita a varios de los bares de tan singular pueblo. Una cañas algo de cena y a pasar la noche en las furgonetas.

Datos Técnicos:
Dos días de Actividad / Fecha: 14-15-16 de Febrero del 2020
Distancia 37 km / Desnivel + 1.217 m. / Track

El primer día:

Con la idea de aprovechar al máximo decidimos utilizar el teleférico de Fuente De para salvar los primeros 700 metros de desnivel, y con todo preparado y echado a la espalda fuimos a primera hora a la estación.

Al comprar los billetes ya nos adelantaron que al día siguiente iba a ser probable que no funcionasen por el intenso viento previsto, de ahí que ya los planes fueran variando

Haciendo cola para montar en tan peculiar transporte, muy recomendable eso si, nos mezclamos con multitud de montañeros, lo que no sabíamos es que junto a ellos tendríamos una de las experiencias más intensas que hemos tenido en los últimos tiempo, y que marco el fin de semana por entero

Dos días en Picos
Teleférico Fuente De

El Funicular:

Subir a este teleférico en el que entran unas treinta personas, es siempre una experiencia, pero si ya lo haces con nosotros, es la leche. Venga comentarios acerca del buen o mal funcionamiento del mismo, inquietud entre los turistas, y risas constantes.

Viajamos en la cabina, apiñados entre la gente y nuestra propias mochilas pero en solo unos minutos nos ahorrado el desnivel inicial, y ya estamos a más de 1.800 metros de altura. Y utilizamos esta estación como el punto inicial del trekking de estos dos días en Picos

Dos días por Picos
Bajando del refu

Comenzamos a caminar:

Con nuestros macutones de travesía, cargados con el material suficiente para sobrevivir estos dos días de marcha, comenzamos a caminar pesadamente por la estación.

Salir de este teleférico siempre es un placer para los sentidos, el balcón tras nuestros pasos cae a pico hasta Fuente De, impresionando a montañeros y turistas. Frente a nuestros pasos nos esperan las grandes cumbres de esta cordillera, un mundo de nieve, hielo y piedra, bajo un sol que no calienta, pero ilumina el terreno al que nos dirigimos

El resto de grupos, libres del peso de las grandes mochilas de travesía avanzan algo más rápidos, pero nos sentimos fuertes y con ganas, no es tanta la diferencia que nos sacan, y atravesamos juntos la distancia que no separa del Refugio de Cabaña Verónica.

La senda ya completamente llena de nieve nos obliga a sacar el material de alta montaña, y transitamos junto al «Jou Sin Tierra», una honda depresión que queda a nuestra izquierda, con el cuidado de requerido para la ocasión. Pero disfrutando de un día increíblemente claro, en un entorno magnifico.

Llegados a la altura del refugio nos separamos del grueso de montañeros para ascender hasta él, y allí nos tomamos un tiempo, dejamos nuestra cosas tomamos un refresco y preparamos la ascensión al Tesorero, las gracias la alegría y el buen humor lo inundan todo nos hace que cada momento sea de placer completo, la magia de un grupo como el nuestro se manifiesta así, en este lugar, brotando por si misma.

De Cabaña Veronica a Espinama
Puerta de Cabaña Verónica

Hacia la cumbre y la verdad:

Salimos del refugio ataviados con todo, casco, piolet, crampones, y hasta los arneses en la mochila junto a una cuerda de randone, el Tesorero es un pico de los que llaman fáciles, asi aparece en todas las guías de montaña, sabemos que tiene como mucho un paso de segundo pero… «el valor del montañero es inversamente proporcional al peso que transporta» . Nosotros somos mucho más prudentes que valerosos.

Caminamos la primera parte por la nieve avanzando rápidos pero sorprendidos por la cantidad de gente que se ve en la ultima zona de la ascensión en el mini corredor y en la cara norte del Tesorero, eso nos hace ralentizar algo la marcha pues pensé que era mejor así, esperar que se vacie lo suficiente para no juntarnos con tantas personas en el tramo más expuesto de todo el viaje.

La gente no se mueve y sigue aglutinada en la misma zona, es raro, no parece que sea tan difícil.

Raúl y yo vamos por delante, casi llegamos al collado que da paso a la última rampa, baja un grupo hacia nosotros y grita, «¡No sigáis, esta muy peligroso¡», sorprendidos, y confundidos no entendemos esto, y mi pregunta sale desde dentro, incrédulo total… ¿Porque?…

Ya juntos nos explica que ha caído uno… alguien se ha precipitado montaña abajo, rápido preguntamos si necesitan algo, ellos dicen que el grupo aún está en esa zona que son los que no se mueven, decidimos continuar por si se puede ayudar sobrecogidos por lo que está ocurriendo.

Todos juntos, incrédulos y sorprendidos llegamos hasta el collado final allí, unos esquiadores de montaña, esperan preguntamos si es el accidentado es de su grupo y no dicen que no pero que casi le lleva por delante, y que uno de sus compañeros, ha descendido con los esquís para ver al accidentado, nuestra alegría y disfrute tiene un paréntesis enorme al ver alguna gota de sangre sobre la nieve. Ahora todo es diferente.

Invernal al Tesorero
Pequeña canal

Nos mantenemos en el sitio viendo si bajan los que aún están metidos en la pala de nieve, no caminan casi no se mueven, cuando están algo más cercanos me arranco y me dirijo a ellos, están en shock o eso nos parece, aún no son capaces de reconocer si el accidentado es de su grupo pero se ve que si lo es.

Confirmado que ya esta avisado el equipo de rescate, ayudamos a esta gente a descender estos metros algo más comprometidos y hablamos entre nosotros, ¿seguimos adelante?.

De los cinco, dos deciden no continuar, y tres pensamos que tendríamos que intentarlo con la máxima prudencia, no se ve que esté más peligroso de lo habitual, y las condiciones son ideales, además ya no queda nadie en el recorrido, lo vamos a intentar…

Superamos el pequeño corredor, y al llegar a lo más alto vemos que hay algo de rimaya, pero lo peor es la cara norte, ahí esta lo que ha propiciado el accidente, toda esa cara esta cubierta por una gruesa capa de hielo cristal. Sin duda este es un inconveniente muy importante a tener en cuenta, cuando nos enfrentamos a una montaña catalogada como fácil.

Salimos a la cara norte, sobrecogidos por lo vivido, vamos con mucho más cuidado de lo habitual y con los cinco sentidos puestos en lo que hacemos, y sin problema llegamos a la cumbre, solo un par de fotos y ha regresar, con mucho más cuidado aún del que nos ha traído hasta lo más alto. Hoy nos vamos sin celebrar nada, ya o haremos abajo.

Interior del refu
El grupo en el interior

El regreso al refugio y la noche:

Al llegar de nuevo al collado, nos encontramos con el grupo de esquiadores, continuan esperando a su compañero. Ya llego el helicóptero de rescate, y justo ahora vemos que llega el de la Guardia Civil, mal asunto eso es mala noticia, pues entendemos que viene a un levantamiento. Ya que no sabemos cuanto van a estar alli nos ofrecemos a dejarles ropa o lo que sea, y al poco termina apareciendo su compañero, todo ha terminado, y regresan al teleférico.

Por nuestra parte, nos dirigimos al refugio, donde ya están nuestros dos compañeros, y ademas se nos han unido dos personas mas de León y una curiosa pareja de extranjeros, el de Estados Unidos y ella de Canada, más majos que las pesetas y que deciden pasar la noche en un agujero en la nieve, según el porque el refugio es incomodo, nos reímos si, pero tenía razón .

Cabaña verónica es uno de esos refugios singulares, no hay otro igual, se trata de la torreta del cañón de un porta aviones, y es minúsculo, tiene camas litera para seis muy cariñosos, y el que se mete al fondo contra la pared no puede ni girarse porque se da con la litera de el de arriba.

La cena fue lo mejor, por turnos entre los que estábamos allí, pues no cabíamos, cogimos las cervezas, y dejamos el dinero en el bote al efecto, cosa que no podemos decir de los otros que estaban allí.

Apesar de que el accidente fue tema principal de conversación en el refugio, logramos abstraernos, disfrutar y descansar para el día siguiente. Agradeciendo estar allí dentro pues según avanzaba la tarde se que levantando un fuerte viento que al día siguiente era ya vendaval

Vueltona
Bajando de la vueltona

Segundo día:

Bien de mañana nos levantamos, desentumecimos los cuerpos después de haber estado encamados en tan pequeño espacio, y desayunamos sorprendidos con la fuerza del viento, estaba claro que el teleférico no iba a estar abierto.

Salimos del refugio, bien pertrechados, y casi volando, para deshacer el camino, bajamos del refugio y llegamos a la senda que baja hacia el teleférico, antes de llegar a este, en la Horcadina de Covarrobres, cruzamos de valle, eso si luchando contra el vendaval que alli había y comenzamos a bajar hacia los puertos de Aliva.

«Me encantan estos nombres parecen sacados de los libros de Tolkien»

Caminamos con Peña Olvidada a nuestra izquierda, azotados por el intenso viento, pero ya vemos el edificio del Chalet Real, por el que tenemos que pasar, y más abajo, el complejo del refugio hotel de Odriozola, que en este tiempo permanece cerrado, pero esta vez nos ayudara a protegernos del viento y tomar un pequeño descanso.

Dos días por Picos
Los Invernales de Igüedri

Saliendo por la pista bajamos rápido y cuanto más bajo menos viento, eso nos permite disfruta más aún del paisaje de esta zona. Ya dejamos los grandes picos y ahora disfrutamos de los tranquilos prados de Cantabria

Nos queda la última ascensión y muy leve, pues tenemos que llegar al collado del Boquerón, y tras pasar su cancela, pasamos al último tramo, de nuestro trekking de dos días por Picos

Sin darnos cuenta entramos en los invernales de Igüedri, lugar mágico de pequeñas cabañas, que antiguamente se usaban para el ganado, ahora parece que las usan los humanos pero no han perdido su belleza.

El bosque empieza a rodearnos y sin salir de la pista que ahora baja a grandes rampas llegamos a Espinama, pequeño pueblo que esta a unos pocos kilómetros del aparcamiento de Fuente De, donde tenemos los coches.

Mientras los demás esperan, unos lugareños muy amables me llevan hasta ellos, y así terminamos esta aventura de dos días en Picos de Europa

Estos dos días en Picos:

¿Que más se puede vivir en la montaña?, en dos días en los Picos de Europa, hemos tenido más emociones que en un año, pero siempre hay que tener presente la prudencia.

Sin duda ha sido agridulce lo vivido, la alegría de los compañeros y la naturaleza. Pero lo duro de lo caro que es vivir esta gran pasión: descanse en paz el montañero perdido.